Este verano las circunstancias en el mundo entero son especiales, pero algo no cambia para muchos de nosotros: las ganas de viajar, las ganas de conocer el mundo, de desconectar de la rutina. Porque viajar siempre es la mejor elección.

Cuando comenzó el año estuvimos mirando sitios a los que queríamos viajar. En Semana Santa Viena había sido el lugar escogido. Al final no pudo ser y Austria se nos queda apuntada para otro momento futuro, espero que cercano.

Nuestro verano soñado

Y para este verano estuvimos mirando circuitos por Canadá. Iba a ser un verano de los buenos. Teníamos pensado casi todo lo que queríamos ver. Ya hemos estado dos veces en Canadá y nos encantó las dos veces.

La gente es tranquila, educada, simpática y tiene unos paraisos naturales alucinantes. Además, también hay grandes ciudades por si eso es lo que te apetece. Por todo eso queríamos volver.

Esta vez Canadá se queda como destino soñado pendiente, es un país tan enorme que, aunque viajáramos cada año, seguiríamos encontrando cosas nuevas que ver y destinos nuevos en los que estar.

Navidad ¿qué pasará?

¿Qué pasará en navidad este año? Me gustaría mucho tener una bola mágica en la que se viera el futuro y poder saber cómo estaremos todos para entonces. Y si pudiera elegir elegiría volver a Japón, mi país favorito del mundo, y de paso, ya que está más o menos cerca, conocer algunos sitios más de Taiwan.

Cada nochevieja que hemos pasado en Japón ha sido especial. Siempre hemos recibido el año nuevo en un templo o santuario, divertidísimo y muy diferente  a todo   oque habíamos conocido hasta entonces.

Viajar por España, otra gran opción

Si no pudiéramos salir muy lejos, quedarnos en España y conocer nuevos rincones sería una buena idea. No solo nos quedan islas a las que ir, preciosas todas, sino que hay ciudades del interior que nunca hemos pisado y, como no, un montón de parques naturales que queremos ver.

Lugares que no puedes perderte en Japón

Ahora, vamos a imaginar que en una semana nos vamos a Japón. Estos son los lugares que no tendríamos que perdernos en las dos principales ciudades. Voy a recopilar un poco y así será como volver a estar allí.

Tokyo

Imprescincible visitar esta ciudad en cualquier viaje a Japón, sea tu primera vez o no. Allí podrás pasear por Akihabara ,la ciudad electrónica. Ver el templo de Asakusa y conocer su calle comercial Nakamise-dori.

Puedes darte una vuelta por Shinjuku y Harajuku y que te den ganas de comprártelo todo, y, por supuesto, comerte un maravilloso crepe en Takeshita Dori.

Subir a una de las dos torres del Edificio del Gobierno Metropolitano, el Tochō, es una gran idea. Tiene dos magníficos miradores panorámicos situados a 202 metros desde los que disfrutarás de una panorámica genial de Tokyo, y encima gratis.

Y, por su puesto, Shibuya, merece la pena ir de día y de noche. De día podrás entrar a todas sus tiendas y comer en cualqueira de los cientos de restaurantes de todo tipo que hay. Por la noche se encienden las luces y parece que estás en un barrio diferente.

Kyoto

Si lo tuyo es «ir de templos», tu ciudad es Kyoto. Puedes pasarte varios días yendo de templo en templo y no verlos todos. Si quieres que te diga algunos de mis favoritos, toma nota:

Fushimi Inari-taisha:

Seguro que conoces el sitio aunque sea por haberlo visto en la película «Memorias de una Geisha». Es un santuario sintoista que tiene más de 400 km de toriis. Para empezar la visita a la diudad está bien, se encuentra solo a 4 km de Kyoto, es fácil llegar en tren.

Kinkaku-ji:

Mi templo favorito de Tokyo es el Kinkaku-ji, conocido como el templo dorado porque parece realmente de oro. Si solo puedes ver unos pocos no te pierdas este.

Gion:

Pasea una tarde noche por el distrito de Gion. Es el barrio de las Geishas y si tienes suerte podrás ver alguna Geisha o Maiko caminando cuando empieza a oscurecer.

Bosque de Bambú de Arashiyama:

En Arashiyama está el bosque de Bambú más famoso de Kyoto.

Además, en Arashiyama hay varios templos preciosos y una calle comercial con un montón de tiendas pequeñas y restaurantes. Pasear por el puente Togetsukyo que cruza el río Katsura es una maravilla en cualquier época del año.